Desacertadamente, se considera que el mantenimiento de formas marinas locales, no tropicales, es una práctica pobre para la acuarofília. A pesar de que no ofrecen la variedad y colorido de las especies tropicales resultan adecuadas para una interesante colección. Estas especies necesitan temperaturas entre 8 y 20ºC y por lo tanto no necesitan calefacción.

Los tanques de agua marina fría necesitan poco equipo técnico y no son caros de mantener. Los ejemplares pueden recogerse sin coste en la zona litoral, procurando producir el menor impacto posible. Resulta adecuada la elección de ejemplares entre 25 y 75 mm de longitud, y procedentes de una misma localidad, para formar una colección con peces invertebrados, que al juntarlos no se produzca ningún trastorno. A pesar de que se puede utilizar agua de mar local para llenar el tanque, esta puede estar contaminada. Se recomienda el uso de la mezcla estándar sintética de agua de mar. La mayoría de especies marinas de agua fría comen alimentos carnosos o algas. A pesar de que estas especies se reproducen fácilmente en sus hábitats naturales, lo hacen con más dificultad en un acuario de interior, resultando difícil llegar a seleccionar las parejas adecuadas

Especies

Anemona dalia
Cabruza
Estrella de mar
Gusano tubicola